Pastoral en el Colegio San Nicolás:
Forjando Valores y Vínculos en la Comunidad
En el corazón del Colegio San Nicolás de Maipú, el oratorio y la pastoral han demostrado ser pilares fundamentales que no solo promueven los valores arraigados en la tradición educativa, sino que también impulsan la innovación y el compromiso social. La innovación y la solidaridad convergen en la labor del oratorio y la pastoral, donde se busca instaurar un ambiente de aprendizaje enriquecedor y dinámico. Los protagonistas de esta experiencia son los estudiantes, quienes encuentran en estas instancias oportunidades únicas para crecer personalmente y en comunidad, a través de proyectos conjuntos que fomentan la responsabilidad y el respeto mutuo. Este enfoque trasciende las aulas y se convierte en una forma de vida, preparando a los jóvenes para ser ciudadanos activos y conscientes en la sociedad. Amanda Anguita, Encargada de Pastoral nos comenta “La Pastoral aporta principalmente al desarrollo y fortalecimiento de la vida espiritual de los y las estudiantes, los y las colaboradores(as) y de las familias, favoreciendo el encuentro con Jesús, su mensaje y sus enseñanzas.
En una comunidad de pluralidad religiosa colabora en la transformación cristiana de la comunidad, la comuna, y el país, en la medida que forma para el mundo interior tanto como para la sana convivencia, el diálogo, la empatía, la acción social”.
La comunidad educativa del Colegio San Nicolás de Maipú reconoce que el oratorio y la pastoral no solo son espacios religiosos, sino que también son espacios de encuentro, diálogo y reflexión. A través de estas instancias, se fortalecen los lazos entre estudiantes, profesores, padres y colaboradores, creando una red de apoyo y compañerismo que se extiende más allá de las paredes del colegio. Los valores fundamentales de respeto y responsabilidad se entrelazan con un enfoque en el aprendizaje significativo, asegurando que los estudiantes no solo adquieran conocimientos, sino que también desarrollen habilidades para la vida y sean ciudadanos comprometidos, solidarios e innovadores, preparados para enfrentar los desafíos de la sociedad con una perspectiva ética y una comprensión profunda de su rol en el mundo.