Este miércoles, nuestro colegio volvió a llenarse de vida con el regreso de nuestros estudiantes. Tras las vacaciones, los pasillos se llenaron de risas, conversaciones y la emoción de compartir nuevamente en comunidad. Ver a nuestros estudiantes reencontrarse con sus amigos, retomar sus actividades en las salas y compartir en los recreos nos recuerda lo valioso que es crecer juntos, en un ambiente donde cada uno es protagonista de su aprendizaje, desafiándose a innovar, a trabajar en equipo y a aportar con solidaridad y respeto a la sociedad.

Este inicio de año también ha coincidido con un tiempo muy especial en nuestra vida de fe: la Cuaresma. Un período de cuarenta días de preparación para la Semana Santa y la Pascua, que nos invita a crecer, reflexionar y fortalecer nuestro compromiso con los demás. En este contexto, el viernes 7 de marzo, nuestros estudiantes desde Prekínder hasta Octavo Básico vivieron un significativo acto de inicio de Cuaresma, con la imposición de cenizas como signo de humildad y renovación. A través de este gesto y de la Palabra, buscamos dejar una huella en cada uno de ellos, invitándolos a vivir este tiempo con profundidad y sentido, en sintonía con los valores de nuestro Proyecto Educativo Institucional.

Nos espera un año lleno de aprendizajes, experiencias y momentos inolvidables. ¡Que sea un gran año para toda nuestra comunidad educativa!